Queridos Reyes Melchor, Gaspar y Baltasar:
Este año, como todos, me he portado
digamos que bien, aunque tengo un margen de mejora.
Pero no os voy a pedir nada para
mí, ya que me basta con la salud, que me tocó el día 22, como siempre, y
mantener el trabajo, que aunque no es de lo mío y tampoco soy indefinido, pero
peor están otros.
Lo que quiero que traigáis es
carbón a mansalva y si puede ser alguna dimisión. Aunque esto último lo veo
harto improbable porque lo que falta en este país es vergüenza torera.
Quizás por eso en alguna parte del mismo han suprimido las corridas de toros
para que no cunda el ejemplo.
El carbón es en primer lugar para
señor que reniega de su primer apellido y no sé porque extraño complejo
juvenil, posiblemente de ver la serie
Dallas, se deja llamar por las iniciales del segundo. Su motivo ser un
mentiroso compulsivo y además desmemoriado. Porque decía que no había crisis,
luego resulta que estamos en recesión y va para dos años, en marzo, que iban a
llegar unos brotes verdes. Los cuales deben ser de una cosecha tardía pues
llevamos dos años en barbecho y ahora predice que quedan otros tres más. Además
de tener una cara muy dura por querer saltarse los pactos
de Toledo.
El otro es un señor
que nos tiene manía a los habitantes de Navarra, ya que no nos quiere traer el tren
porque tenemos un scalextrix en Los
Arcos.
Y el tercero es otro señor, este
muy peligroso, pues le preocupan más los fines que los medios. Estos le da
igual, además ha sobrevivido o todos sus excompañeros de corrupción,
malversación y oscura financiación (caso GAL,
Filesa,
etc.).
Por último por aquello de la
paridad y para no ser tachado de machista también hay tres señoras a las que el
carbón les sentaría muy bien.
A una le gusta ser la barbie
militar aunque ella se declare pacifista. Iba a traer a los soldados para
casa, pero no se porque extraño efecto cada vez hay más y en más lugares
peligrosos.
La otra ha tenido mucha suerte,
está muy bien colocada, ya es ministra y hasta ha tenido varios sueldos a la
vez. No hay que olvidar que los de su generación están muchos en el paro o con
contratos precarios.
Y la última, me da hasta algo de
pena, pues lo mismo vale para un roto que un zurcido, antes de ayer era
ministra de gripe aviar, ayer fue procandidata a presidenta de autonomía, hoy
ministra de entuertos internacionales y mañana con un poco de suerte está junto
con sus compañeros en la cola del paro, pero eso sí con jubilación máxima
asegurada aunque no trabajen más.
Ojala sea así!!!
Bueno por soñar que no quede que
esta noche es noche de Reyes.
PD. Gaspar que eres mi rey mago
Lo que si que quiero es que todos
mis compañeros de paro y contrato precario puedan tener un empleo estable y un
sueldo digno. Como dice nuestra carta magna.
