Estamos acostumbrados a que reconocidos deportistas ganen sumas astronómicas ejerciendo su profesión. Reciente renovación de Messi
(11 millones de € fijos más 4 en objetivos), objetivos que en su caso
muchos están ligados a los del conjunto del equipo. Otros incluso ganan
más de sus derechos de imagen que de su profesión, casos de Schumacher y
Michael Jordan, tanto que incluso alguno se permite donar casi todo su
sueldo deportivo, último contrato de Beckham. Otro tanto pasa con los actores Tom Cruise, Denzel Washington,
20 millones de $ por película, Julia Roberts hace tiempo que llegó a
los 12, etc. Por no hablar de lo que cobran por algunas exclusivas
ciertos “famosos nacionales” en programas de televisión de la llamada prensa rosa o telebasura. Estas últimas cantidades que a un “currito” le puede costar un lustro o una década ganar.
Pero
¡ay! cuando hablamos del sueldo de un trabajador. Si nos toca
negociarlo nos da vergüenza ó pudor decir la cantidad que consideramos
justa. Además siempre pensamos que cobramos menos de lo que nos
merecemos, mientras que por el contrario nos parece desorbitado lo que
gana el compañero de la empresa de al lado.
Hace tiempo por motivos de crecimiento profesional realicé varios cursos de resolución de conflictos
y de técnicas de negociación, por cierto muy buenos. En ellos se
incidía en el tema de “yo gana y tú ganas”; objetivo que normalmente no
se lleva en la práctica real. Para muestra nuestra sociedad con sus,
cada día mayores, desigualdades. Desde entonces me gusta seguir en
prensa e internet las negociaciones entre trabajadores y empresa. Estos
días por desgracia hay muchas en nuestra cercana realidad. Por un lado
es sorprendente el grado de “envidia” y encono de algunos comentarios
acerca de lo que supuestamente ganan los trabajadores de TRW
o los funcionarios. De otro estamos entrando en el nudo de la
negociación de un convenio importante para nuestra ciudad y comunidad,
del cual a todo el mundo nos gusta opinar, desde nuestros dirigentes
políticos hasta el vecino del portal.
Pero
aténganos a ciertos datos, una plantilla con una media de cuarenta y
tantos años, que si estuvieran en el paro nadie querría contratarlos con
esa edad, lo sé por experiencia propia. Que en 2010 ganaron su mundial,
en las últimas temporadas han batido su record absoluto de producción
consecutivamente, y su record individual de productividad siendo
posiblemente el más alto de su grupo y de su sector a nivel mundial, que
en su liga de seguridad, desde que participan, han llegado siempre a la
“Final Four”
y la han ganado dos veces y subido el resto de veces al podio. Vamos el
Barca o el Real Madrid de la liga del automóvil. Y sólo piden el IPC,
aún a sabiendas de que así no mantienen su poder adquisitivo por la
subida de impuestos de los últimos años, y una participación del diezmo
de los objetivos de beneficios, si los hay(*), que como mucho llegará a
una paga extra. Ni de cerca a los 7200 euros de sus compañeros alemanes.
(*)
Ya sabemos la ingeniería financiera que hay en los grandes grupos, hace
años tuve la oportunidad de trabajar para un conocido grupo cooperativo
de nuestra comunidad a cuya presentación de cuentas asistían los
consejeros del gobierno foral, curiosamente aquellos años el grupo
ganaba una cantidad similar de beneficios, pero la empresa en la que
trabajaba que estaba a mitad de la cadena de valor nunca tenía unas
cuentas boyantes, bien fuera porque las materias primas eran caras, bien
porque el producto final no subía, ya se sabe lo que aprietan las
grandes superficies. De manera que nunca vimos parte de esos beneficios
que nos enseñaban cuan zanahoria, lo que si vimos fueron los palos.
Por
contra la dirección les exige más flexibilidad (aumento de jornada
laboral anual, cambio de inicio de turnos, no saber hasta quince días
antes (n+1) cual va a su calendario definitivo del mes siguiente,
disponer de un solo día libre al año, el cual entra a sorteo si
coincides con cuatro compañeros). Teniendo en cuenta que este año ni
siquiera tiene producción para ocupar la jornada anual a la baja (205
días de trabajo). Algo incoherente. Además cuando esa plantilla, desde
fuera y a juzgar por sus logros, ha demostrado estar a la altura en los
momentos necesarios. Ya se habrán dado cuenta que me refiero a VW.
Nº 406 Polo Zoom
Personalmente
como trabajador me alegro que el vecino pueda ganar más, así yo podré
pedir más y ganar más. De lo contrario pasa que nuestros jóvenes emigran
y que a este paso hasta el resto nos tengamos que ir también. Además me
gusta saber que los mejores son los que están en los equipos, aunque
sea para apretar tornillos, despiezar canales, hacer potitos, embutir
chorizos, poner ladrillos o jugar a las canicas. Los mejores lo
demuestran con sus estadísticas de resultados, los premios y los logros
conseguidos. Para motivarlos hay que remunerarlos de acuerdo a ellos y
mantenerlos para evitar que se marchen a otros equipos con su saber
hacer.
Ser
líder supone un pequeño coste extra que a la larga da muy buenos
resultados; en realidad hay que verlo como una inversión a largo plazo; y
como en aquel programa de los 80 donde Fernando García Tola le decía a Carmen Maura “Nena, tú vales mucho”, y aquella otra campaña publicitaria “...porque yo lo valgo”. Ellos, también, lo valen.
Oye muy bueno, si no te lo publican, porque no lo mandas a otro sitio.
EA
Oye muy bueno, si no te lo publican, porque no lo mandas a otro sitio.
EA
Ya sabes, que si te sales de la editorial o te metes con VW, UPN, etc. Te censuran.
H