Este
domingo, 15 de mayo día de S. Isidro se celebra también la tercera pascua que
hay en el año litúrgico de los católicos. La Pascua de Pentecostés (cincuenta días después de
Pascua), que
tiene su origen en una fiesta judía, el día en que Dios les dio la ley en el monte
Sinaí. Sin embargo los cristianos conmemoran la venida del Espíritu Santo sobre
los apóstoles, siendo además
el día del Apostolado Seglar y la Acción Católica.
La Acción
Católica como toda institución u organización que tiene un largo recorrido
histórico tiene sus luces y sus sombras. Entre sus luces hay que destacar el
impulso que dieron a muchas cooperativas en el ámbito rural en nuestra
geografía (Movimiento Rural Cristiano y Movimiento de Jóvenes Rurales
Cristianos), el ser uno de los hábitats en donde en la clandestinidad el
movimiento sindical se preservo durante la dictadura (Juventud Obrera Cristiana
y Hermandad Obrera de Acción Católica), también fueron muy activos en la década
de los 60 la Juventud Estudiante Católica, la Juventud Independiente Cristiana
y el Movimiento de Profesionales Cristianos. Fruto de la iniciativa de las
Mujeres de Acción Católica son los Centros de Cultura Popular y la conocida
Manos Unidas, y en nuestra diócesis, al inicio de la década de los 90,
Inyasida. Relevante es la labor de los miembros de Fraternidad Cristiana
de Personas con Discapacidad (Frater). Merece recordar la participación de los Jóvenes de Acción Católica en
el Sínodo Diocesano. Sin olvidar que dos jóvenes pamploneses fueron miembros de
la Comisión Permanente en Madrid a principios y finales de los 90 y que
Pamplona, en 1988, fue la sede de la Asamblea Nacional de dicho movimiento
juvenil.
La
dicotomía que planteaba en 2013 el sociólogo Javier Elzo, Los cristianos ¿en la
sacristía o tras la pancarta? Es rota por los militantes de los distintos
Movimientos de Acción Católica presentes en nuestra diócesis (HOAC, FRATER y ACG)
empleando el método Acción-Reflexión-Acción-Celebración. La Revisión de Vida les ayuda a
realizar una lectura creyente de la realidad y les lleva a una acción
transformadora de la misma en la que están.
Dicha
dicotomía se convierte en una doble línea de actuación por un lado en una tarea
intraeclesial (los
distintos Movimientos de Acción Católica son de ámbito diocesano y vocación
parroquial) participando
en la vida de las mismas bien como monitores de grupos, lectores, ministros de
la comunión, campamentos, etc. y en los Consejos Pastorales Parroquiales y
Diocesano. Y de otro lado en un compromiso social cristiano participando en la
vida pública en asociaciones y realidades sociales, colegios profesionales, etc.
pero teniendo siempre presente desde dónde y para qué, haciendo una opción
preferencial por los pobres y desfavorecidos desde la óptica evangélica. Todo
ello enmarcado en el Plan Personal de Vida Cristiana, que se revisa y evalúa personalmente
y en cada grupo, anualmente.
El
inicio en un equipo de revisión de vida es una apuesta por un camino de
iniciación a la vida de fe en sus dobles facetas personal y comunitaria,
privada y pública, con un plan de formación continuo y en espiral,
profundizando cada vez más, en cada tema y creando espacios en donde convivir y
compartir la vida y la fe, tratando de cumplir su vocación misionera y
evangelizadora e intentando ser testigos de la misericordia.
Nota Publicado como Cartas al Director en el Diario de Noticias el 14-05-2016.
Y en el Diario de Navarra el 15-05-2016 como Cartas de los lectores con el título de "Solemnidad de Pentecostés".
Así que te has pasado a la competencia
JO
Pusiste ese título?Bueno, menos es nada, muy bien! En la hoja diocesana nada? Es terrible.
MA
Ya te he visto y leido, así dando testimonio.
PA
Gracias por tus artículos. Aunque a veces pareces un poco curica.
JLU